Europa apuesta por la seguridad del mercado inmobiliario español

Según un reciente estudio del sector, cada vez son más los compradores europeos que ven en el mercado inmobiliario español una garantía de estabilidad para sus inversiones. El ahorro generado durante este último año y medio en aquellos hogares de rentas altas, cuyos gastos se vieron reducidos por las restricciones impuestas por la pandemia, ha propiciado una reactivación de las operaciones de compra-venta, con especial incidencia en el mercado de segunda residencia.

Los nuevos compradores vienen de países como Alemania, Bélgica, Reino Unido y el este de Europa, y el número de operaciones cerradas en nuestro país no ha dejado de aumentar desde que comenzó la desescalada. Aunque el perfil inversor no ha cambiado esencialmente, sí se ha constatado una mayor demanda de propiedades grandes, con terreno y ubicadas en zonas rurales o próximas a la naturaleza.

La crisis sanitaria que hemos vivido ha traído cambios en nuestro estilo de vida y ha acelerado la implantación del teletrabajo en muchos sectores profesionales, de ahí que la propia concepción del hogar haya sufrido también una significativa transformación. La casa, ahora, además de seguir siendo el centro de la vida familiar, se ha convertido en un espacio seguro para el ocio y el trabajo.

Los compradores europeos llegan a España atraídos por el clima, los espacios naturales y los precios competitivos, lo que les proporciona una alta fiabilidad en su inversión. La fórmula más común para garantizar su compra es combinar el uso propio de la vivienda con el alquiler en períodos vacacionales, de tal forma que puedan reducir los riesgos financieros con vistas a una rentabilidad a largo plazo y el posterior retorno del valor añadido, al tiempo que disfrutan temporalmente de la propiedad.

En definitiva, nos encontramos ante un momento clave y de estímulo para nuestro mercado inmobiliario del que los inversores europeos ya se están haciendo eco. Convendría estar atentos.